No hay relación sexual VII Jornadas de la NEL El sexo y el amor en el siglo XXI, ¿de qué satisfacción se trata? Medellín, Octubre del 2012 No. 10 Marzo 16 del 2012 Moderador Piedad de Spurrier ( [email protected] ) Todos los miembros y asociados de la NEL están invitados a participar en este boletín con sus textos, comentarios, notas y observaciones sobre los temas del debate. Éstos pueden ser enviados a la moderadora.
En este número * Presentación * La época del empuje al goce, por Alba Alfaro * De la disimetría del amor y el goce, por Edwin Jijena * Comentarios * Algunos hoteles recomendables en Medellín y tarifas
Presentación Alba Alfaro, nos plantea una pregunta a los analistas del siglo XXI ¿Qué resta del amor y la sexualidad, cuando el significante fálico como regulador del goce, ha perdido vigencia a favor de la ficción del hombre como amo del goce? Edwin Jijena nos plantea el tema de la disimetría entre el amor y el goce en la obra de Lacan e invita a continuar dicha elaboración en el seminario XX Aún, para extraer algunas consecuencias sobre el tema en cuestión. En nuestra sección de comentarios, Gisela Cordido en la misma vertiente de elaboración de Edwin Jijena nos plantea una elaboración sobre cómo es posible que el goce ya no se introduzca en oposición al amor, sino que transite por un camino diferente. Antonio Aguirre reitera con Héctor Gallo (NRS-9) sobre el estatuto de la sublimación en la mujer hoy y avanza con una pregunta: ¿Qué sería hoy, un hombre digno de amor, respeto y admiración? Respuesta de una por una, a desplegarse en la experiencia analítica. Susana Strozzi recoge el hilo conductor de las elaboraciones acerca del amor, las mujeres y los hombres para plantearnos que solo es posible acercarse a esa disparidad, señalada por Héctor Gallo y Antonio Aguirre, en el caso por caso. Comisión Científica La época del empuje al goce Cartel correspondiente al eje no 4: « Ideologías contemporáneas, sus prácticas y su interpretación del sexo y del amor; el psicoanálisis y esas prácticas, legislaciones y tabúes vigentes ». Alba Alfaro Lacan afirma que es « …el objeto a en tanto que liberado« , lo que « plantea todos los problemas de identificación » al ser hablante. « Con él se debe terminar, a nivel de la neurosis, para que se revele la estructura de lo que se intenta resolver, a saber, el significante de A barrado, la estructura a secas.« [1] En el siglo XXI podemos constatar la pertinencia de lo que propone Lacan en su momento: « …el prodigioso desborde de la relación con el objeto a,… ¿Esto no es por sí solo, la indicación de lo que atañe a la libertad de pensamiento?« [2] La época del hombre sin atributos impone la ficción del individuo como amo del goce. Y la función de la psicoterapia en este contexto es, vía la adaptación, ejercer este control. Es lo que Miller define como « la clave de todas las terapias cognitivo-conductuales« , « la afirmación de sí« .[3] A este hombre « medio » de la estadística y de la contabilidad del goce se le promete « un poder ilimitado sobre sí mismo« .[4] El imperativo del empuje al goce determina un borramiento de la división subjetiva y la anulación de la función de la castración, referentes éstos de la identificación sexual y del lazo social. Entonces, si éstos referentes no logran sostener, por la inoperatividad del significante fálico, una « regularizaciòn del goce por la castración »[5] ¿qué resta del amor y cómo se expresa la sexualidad en este contexto donde el deseo es ordenado por este imperativo? Los impasses del goce que colocan al sujeto entre la inhibición y la angustia, con efectos de paranoia y fenómenos de perversión. De paranoia, en la medida en que « …se impone de manera permanente la presencia de la mirada del Otro »[6] y de perversión, en tanto hay la caída de esta mirada propia de la desculpabilización y de la inexistencia del Otro. Esta « caída » implica una posición de « sin pudor », de la cual Miller previene a los analistas en el fin del análisis.[7] Notas [1] J. Lacan, Seminario 16, De un Otro al otro, Paidós, Buenos Aires, 2008, p. 268. [2] Ibídem. [3] J.-A. Miller, « La Era del hombre sin atributos », Virtualia No 15, p. 16. [4] Ibídem. [5] J.-A. Miller, « La imagen del cuerpo en psicoanálisis », Introducción a la clínica lacaniana, ELP-RBA, Barcelona, 2da edición, 2006, p. 377-394; p. 385. [6] Ibídem, p. 394 [7] Ibídem. La disimetría entre el amor y el goce Edwin Jijena Abordar el tema de la disimetría entre amor y goce nos llevaría a otras dos disimetrías en la obra de Lacan a saber: La disimetría del amor: existe una primera teorización en Lacan del amor en función a la teoría del narcisismo freudiano, que la conocemos a partir de la i(a), es decir es siempre dirigida a una imagen, así el deseo tiene una causa que es el objeto a , bajo esta idea hay una contradicción entre amor y deseo, « allá donde se ama no se desea y donde se desea no se ama », etc. Esta primera teorización que tiene que ver con la degradación de la vida amorosa en el hombre, es también la explicación me parece, más masculina del amor. Este primer acercamiento va a llegar hasta el seminario XI, Los cuatro conceptos fundamentales del psicoanálisis, 1964, otras lecturas de este recorrido son: Lógicas de la vida amorosa, Los divinos detalles de JAM, y por supuesto los textos de referencia en Freud, que cita JAM en el primer trabajo. El segundo abordaje de Lacan a propósito del amor, está planteado en el seminario XX Aun, de 1970, donde sitúa el amor como signo, esta manera de abordarlo lo hace del lado del sujeto, de su juego, de su ejercicio, y corresponde al área más femenina, así del lado femenino hay casi una ley sagrada de averiguar los signos de amor. La disimetría en relación al goce, en relación al lado femenino y masculino, no es más familiar, me parece un buen ordenamiento el que retoma JAM, en El Partenaire-Síntoma, sin embargo el seminario XX, Aun es de nuevo la referencia en la diferenciación sexual y la no relación sexual:
MASCULINO | FEMENINO |
Nota Sadiana | Nota extática |
Serie | Lista |
Objeto a | Una por una |
Intersección | Reunión |
Todo | No todo |
Goce Fálico | Goce extático |
Goce del órgano | Goce místico |
Los signos del amor no son los signos del goce, finalmente me parece que todavía habría que discutir si en el seminario XX Aun, Lacan teoriza una oposición entre el amor y el goce, lo plantearía como una interrogante de trabajo. Espero este pequeño punteo nos ayude a trabajar en la elaboración del concepto, Amor y Goce, para luego cada uno realizar una elaboración particular sobre el tema que nos convoca. Comentarios De: Gisela Cordido – al artículo « La disimetría entre el amor y el goce » La invitación de Edwin Jijena a continuar trabajando en relación a su artículo sobre la oposición amor-goce y la diferenciación sexual nos desliza a lo que Lacan apunta en el Capítulo 4 de su Seminario AUN: « Lo que suple la relación sexual es precisamente el amor ». Se trata de una relación sexual que no pudo escribirse por la insuficiencia del lenguaje. Y se trata de un amor, narcisista, puro espejismo, que cree que puede hacer UNO con dos. Viene a salvar la insuficiencia del lenguaje pensar el « mas allá del lenguaje »; es decir la letra, y la posibilidad -con la función del escrito y la teoría de los conjuntos- de abordar el Uno ya no de un modo intuitivo o amoroso. Y el espejismo del amor, encontrará su soporte en la presencia del objeto en todo encuentro; porque no se trata del Uno y el Otro, sino del Uno y el « a ». Así se introduce el goce, ya no en oposición al amor sino en un camino diferente, como dice Lacan un buen camino, que posteriormente, con el concepto de signo, irá mostrando la conjunción entre ambos. De: Antonio Aguirre – al artículo « El amor y las mujeres » Partamos de reiterar que, efectivamente, muchas mujeres ya no se inscriben en la vertiente dionisiaca que para Camille Paglia les era más propia. Hoy son tan constructivas, apolineamente, como sus congéneres masculinos. Su carrera por las vías de la sublimación las lleva a los primeros lugares, por delante de los hombres. La sublimación, dice Freud, satisface la pulsión, sin llevarla a su fin y sin represión. Lacan ve una sustitución: la de la Cosa, por un objeto que asume su dignidad. Ciencia, religión y arte son formas de dicha sublimación. Acaso veríamos igual efecto en otras actividades: la política por ejemplo. Se trataría siempre de poner distancia con el malestar primordial: la discordia con el Otro sexo. Tanto si uno lo quiere de partenaire, como si se pretende serlo. Hasta la guerra sirve como escape heróico al dilema insoluble. Nos salta una pregunta: ¿qué sería, hoy, un hombre digno de amor, respeto y admiración? La tiene que responder ella, una por una. Pero la posición ablandada, enternecida y sensible, la del hombre « feminista », contraparte del bruto abusador con que se escarnece la virilidad, no parece arreglar nada. Estamos en la posición que Lacan define desde el seminario Aun: de lo que se queja la pobre humanidad es que las cosas del amor no andan. Esa es la verdadera demanda para un análisis, lo que hay que ratificar antes de iniciar la experiencia. Así lo expresa en la conferencia de Ginebra. Primero hay que depurar las demandas de las « particularidades », de la « diversidad »: la mujer esto y la mujer esto otro, la de aquí y la de allá. Son los cajones convenientes a la proliferación del discurso universitario, con sus ramas de experticia biopolítica en los que los analistas hallan la tentación de « insertarse ». Suscribimos la interrogante final de Héctor Gallo, porque encarna la maniobra inicial que hemos propuesto contra las respuestas prefabricadas del biopoder higienista. Inducimos una pregunta histérica, en tiempos en que ellas se sienten una promesa para todo. De: Susana Strozzi – al artículo « El amor y las mujeres » I. En tanto que primer término del enunciado, el título indicaría que el centro de la reflexión es la cuestión del amor. La conjunción copulativa, en el lugar del vacío de la no-relación sexual, abre la vía para interrogar, al respecto, la posición de las mujeres. II. De entrada, el texto recuerda que, en la operación de la cultura, es « el lado masculino » el operador. Lectura freudiana que, recurriendo a la noción de sublimación pulsional, distribuye desigualmente los destinos del hombre y de la mujer. Una dinámica económica que coloca a ésta en la posición de enemiga de la civilización – en nombre del amor – o en la de una « renuncia » por la vía del sometimiento bajo los semblantes de la admiración y el respeto por un hombre, que incluye, asimismo, como bien se cita, « el lugar de anudamiento del rencor femenino ». III. En el brutal cambio del escenario de la época al que asistimos, el hilo de los discursos nos orienta para leer un estado de civilización en el cual la pulsión revela su cara más mortífera porque la declinación del ideal viene acompañada por las exigencias del goce. Es el discurso (o seudo-discurso, que Lacan llamó « del capitalista ») contemporáneo predicador de la felicidad en el entramado de una desorganización y reorganización ética fuertemente individualista que ha incidido con vigor en lo que antes se leía como destino. La prueba aportada al final del texto por la referencia a los numerosos casos de « mujeres exitosas » que introducen, sin embargo, desde la cima de su deseo la pregunta: « ¿de qué vale? » se podría colocar al lado del interrogante por los fantasmas masculinos de la época. IV. Junto a los testimonios de la clínica, agregaríamos que más que preguntar por « el amor y las mujeres » o por « el amor y los hombres », la apuesta del psicoanálisis es « saber si tiene algo para decir sobre el estatuto contemporáneo del amor ». Es decir, lo que va de una cuestión de destino a una de dis-paridad, en el caso por caso. Hoteles en Medellín recomendados por una respetable agencia de viajes para las Jornadas de la NEL en octubre del 2012
HOTEL | SENCILLA | DOBLE | TRIPLE |
BELFORT (4*) | $ Col. 219.000 | $ Col. 219.000 | $ Col. 96.000 |
HAB. STANDARD | USD. 131 | USD. 66 | USD. 58 |
PLAZA ROSA (4*) | $ Col. 195.000 | $ Col. 100.000 | $ Col. 82.000 |
HAB. STANDARD | USD. 117 | USD. 60 | USD. 49 |
BEST WESTER (4*) | $ Col. 195.000 | $ Col. 97.000 | $ Col. 83.000 |
HAB. STANDARD | USD. 116 | USD. 58 | USD. 50 |
LA CAMPANA HOTEL BOUTIQUE (4*) | $ Col. 194.000 | $ Col. 111.000 | $ Col. 83.000 |
HAB. STANDARD | USD. 116 | USD. 66 | USD. 50 |
TORRE POBLADO (4*) | $ Col. 146.000 | $ Col. 88.000 | $ Col. 66.000 |
HAB. STANDARD | USD. 88 | USD. 53 | USD. 40 |
PORTALES CAMPESTRE (3*) | $ Col. 173.000 | $ Col. 83.000 | $ Col. 67.000 |
HAB. STANDARD | USD. 103 | USD. 50 | USD. 40 |
POBLADO CAMPESTRE (3*) | $ Col. 158.000 | $ Col. 76.000 | $ Col. 60.000 |
HAB. STANDARD | USD. 95 | USD. 46 | USD. 36 |
POBLADO BOUTIQUE (3*) EXPRESS | $ Col. 128.000 | $ Col. 75.000 | NO APLICA |
HAB. CLASICA | USD. 77 | USD. 45 | |
HABANA VIEJA (3*) | $ Col. 124.000 | $ Col. 69.000 | $ Col. 60.000 |
HAB. STANDARD | USD. 74 | USD. 42 | USD. 36 |
Cambio a la fecha | 1 USD x $ Col. 1.8000 | 1 Euro x $ Col. 2300 |
Tarifas netas por persona por noche, incluyen alojamiento y desayuno. Tarifas en $ Col. incluyen IVA DE ALOJAMIENTO. Tarifas en USD Exentas de IVA, mientras se presente pasaporte extranjero al reservar. No incluye seguro hotelero, el cual debe pagar el pasajero por su cuenta en el hotel.