La masacre escolar en Rio
Por Mario Goldenberg, especial para lanacion.com
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La masacre perpetrada por Wellington Menezes de Oliveira en la escuela Tasso da Silveira de Rio de Janeiro revela que la violencia en las escuelas se ha constituido en los últimos tiempos en un síntoma social, que plantea un desafío de pensar un nuevo real en juego en el ámbito de la institución educativa.
Gus Van Sant director del film « Elephant », que trata de una masacre en un High School de USA, ha elegido el título por la parábola de « los ciegos y el elefante ». En esta historia, de la que encontramos una versión del siglo II A.C. en los cánones budistas, varios ciegos examinan diferentes partes de un elefante: orejas, piernas, rabo, trompa, etc. Cada ciego está completamente convencido de que entiende la verdadera naturaleza del animal basándose en la parte que tiene en sus manos. De esta forma, el elefante es como un abanico, o como un árbol, o una cuerda o una serpiente. Pero ninguno puede ver el todo.
La violencia escolar ha mostrado nuevas formas de malestar, en un ámbito donde se trasmiten ideales, valores culturales y sociales. La escuela no solo se ha convertido en un escenario médiatico de matanzas, Columbine, Virginia Tech, Carmen de Patagones, Beslan, etc, y ahora en Rio de Janeiro, solo para mencionar algunos hechos de una larga serie en diversos países del mundo, sino también tenemos fenómenos nuevos como el bullying, acoso escolar entre alumnos también a docentes, agresiones a docentes, entre alumnos, de padres a docentes.
La declinación social de la imago paterna formulada por Lacan al inicio de su enseñanza, es correlativa de la declinación de los semblantes de autoridad: el médico, el político, quien imparte justicia, etc, y también quien se ocupa de educar.
Es llamativo que la figura del maestro que representaba un semblante de saber en la enseñanza, ha perdido su autoridad. La crítica feroz en « The Wall » de Alan Parker, a la educación como una máquina de picar carne, produciendo una homogenización alienante, donde uno de sus temas dice – Hey, teacher, leave those kids alone – , refiriéndose a los modos de maltrato del educador con sus educandos, se ha convertido en una broma en España respecto del acoso a profesores diciendo – Hey, kids, leave that teacher alone -.
Albert Camus dice en « El mito de Sísifo » que el único problema filosóficamente serio es del suicidio, pues plantea si la vida tiene sentido. Nuestra apuesta es elevar el problema de la violencia escolar a un problema éticamente serio, donde estas nuevas formas de ruptura de lazos, no van en la vía reivindicativa como la revueltas estudiantiles del Cordobazo o el Mayo fránces, hemos asistido, por ejemplo en una escuela técnica de Rosario, a un hecho llamativo, los estudiantes destrozaron el mobiliario de su clase lo grabaron y lo subieron a Youtube, como técnica 666 , « Cuando los profesores no están… esto es lo que pasa en nuestra escuela… », dice el texto que describe el video donde se puede ver a los estudiantes de 15 y 16 años arrojando y destruyendo los bancos y las sillas.
Jacques-Alain Miller ha planteado en su curso « Un esfuerzo de poesía » 2002-2003, que el paradigma de la subjetividad anterior al Dios ha muerto ha sido la ética del sacrificio, la ética de la religión, que ha llegado de alguna manera a nuestros tiempos, en cambio la ética del capitalismo se sostiene en la diversión, la renuncia pulsional que refiere Freud en el « Malestar en la cultura » ha devenido en un mandato a gozar, a no renunciar a nada. La diversión, término que Miller toma de Pascal, se ha convertido en la poderosa industria del Entertainment , y a la vez da cuenta de ciertos modos de la subjetividad contemporánea. Nos encontramos en nuestra clínica con adolescentes que no les interesa saber nada, que además del fracaso escolar, solo les importa divertirse; la escuela técnica de Rosario es un claro ejemplo, también la masacre que muestra el film Elephant, tiene la estructura de un videogame.
Quizás debamos formular que lo grave es destruir el mobiliario de una escuela por diversión , acosar a un docente o un alumno para entretenerse, o las masacres al estilo de videojuegos.
Recordemos que Lacan en la conferencia de prensa en Roma de 1972, plantea a diferencia de Freud que la religión triunfará como refugio del sentido, ante el real arrasador que produce la ciencia. Asistimos a eso, el avance de la ciencia, de la tecnología, del mercado ha producido un efecto devastador en la subjetividad, que implica un rechazo del lazo social y a su vez de lo imposible, la fragilidad de los lazos que Bauman nombra como amor líquido.
También hay algo de violencia líquida, no es necesariamente el odio aquello que comanda la violencia actual.
La violencia vende en los mass media, en la industria del entretenimiento, es más bien el mandato a gozar y la plusvalía quien comanda el discurso hipermoderno, sin ningún dique ético.
El tratamiento inmunitario como refiere Roberto Esposito, filosofo napolitano, autor de Communitas, Immunitas y Bios, plantea que la política de seguridad que intenta preservar la vida, más bien atenta contra esta; vida entendida no como zoé, pura vida, sino bios como forma de vida. Se puede hacer de las escuelas un campo Delta, con cámaras de seguridad y detector de metales, de algún modo Virginia Tech tenía lo último en seguridad pero no puedo evitar la matanza. El joven coreano, realizo su acto, con permiso de portación de armas y con una tutora que se ocupaba de sus conductas antisociales. Chou Seung-Hui tuvo tiempo para enviar su video a la cadena NBC y fue el mismo alerta enviado por la universidad a los celulares de los estudiantes lo que precipito su pasaje al acto.La masacre de la escuela Tasso da Silveira de Rio, tiene caracteristicas similares había sido anunciado en la web en la red social Orkut donde Wellington publicaba sus pensamientos, tambien hay videos de dias anteriores que explica su plan, hay un factor común en estos casos, por un lado siempre hay advertencias en la web que nadie ve y por otro lado una necesidad de estos sujetos de dejar algún testimonio delirante de su acto. Por lo tanto no se trata solo de un asesinato masivo, sino también de dejar alguna inscripción de su horroroso acto en la web, parte del reality show al que asistimos cotidianamente. Esta serie de masacre en las escuelas no están fue del discurso actual , no se trata de un problema del ámbito escolar, sino que no hay que perder de vista el carácter de show, de espectáculo que tienen donde alguien con serias dificultades en el lazo social, puede hacerse un lugar en los medios de un modo horroroso. Unas ultimas palabras un argumento de Wellington fue que había sido víctima de bullying, es posible, el bullying es parte del problema de la violencia escolar, pero eso no justifica su acto, para el psicoanálisis el sujeto es siempre responsable.