Palabras de la Presidente entrante a la XVIII Asamblea Ordinaria de la EOL
Tal como hoy se desarrolló la Asamblea, nos encontramos, como verán, en tiempos de cambios profundos. Y si bien uno lee los textos que vienen de Francia que nos hablan de la política de la orientación lacaniana para el año 2009, debemos suponer que esos cambios vendrán para permanecer más allá de este año. Ahora solemos escuchar que se habla de eras.
Nos encontramos ante decisiones tomadas en el seno de la AMP donde se ha hecho una profunda lectura que abarca la política de todas las escuelas.
En las “Entrevistas de Actualidad” se deja ver claramente el crecimiento desmedido que tuvieron los CPCT en algunas escuelas, más precisamente en la Escuela de la Causa Freudiana y en la Escuela Brasilera de Psicoanálisis, verificándose que era en los mismos CPCT donde se producía la práctica analítica y las supervisiones grupales, llevando a desfocalizar las funciones precisas que tienen las escuelas, que es el lugar donde se custodia el discurso analítico. Me gusta mucho el término “custodiar” porque me recuerda un cuadro cuyo título es Custodios ciegos de los elementos esenciales.
Sabemos, sin embargo, que cada escuela posee su particularidad. En nuestra Escuela, tanto la Red como PAUSA no estuvieron a la deriva del psicoanálisis aplicado; sin embargo, debemos estar atentos a si algo de esta desfocalización se ha producido, asegurándonos de no ser custodios ciegos de nuestros elementos esenciales que no son precisamente, como en el cuadro, el pan y el agua.
La formación del analista, todos lo sabemos, se fundamenta en la enseñanza del psicoanálisis, su análisis personal y el control de su práctica. Esto no ha cambiado y es el sustento y la condición misma de la existencia de nuestras escuelas. La EOL, como las otras escuelas de la AMP, son comunidades de trabajo que se hacen responsables de la formación que dispensan y de los fundamentos precisos que Jacques Lacan nos dejó.
Sus órganos de selección ya los conocemos: son el procedimiento del Pase y la Comisión de Garantía, que evalúan de distinta manera a los psicoanalistas que han dado sus pruebas. Hoy esto no está en cuestión. Lo que hoy está en cuestión es qué clase de nuevos miembros necesitamos para nuestras escuelas. Y si bien en el transcurso de los diecisiete años de la fundación de la Escuela se ha pasado por períodos de gran apertura o estrechamiento para la admisión de nuevos miembros, hoy debemos dedicarnos a revisar qué criterios debemos usar. Este es el gran trabajo que este año tomará a su cargo el Consejo Estatutario.
En este nuevo contexto político, el informe del Consejo propone continuar con el Seminario a su cargo y la Presidenta saliente sugiere que demos un “Seminario de Psicoanálisis”. Por supuesto, agradezco su sugerencia, tomaremos esto en consideración y lo evaluaremos.
Pero ya sabemos que habrá tres grandes eventos para este año: el Encuentro Americano en agosto, nuestras Jornadas Anuales en noviembre y el VII Congreso de la AMP por venir en abril de 2010. Tenemos por delante mucho por pensar y hacer.
Para terminar. En el transcurso de mi presidencia que, como saben, dura el período de un año, sepan que pueden contar conmigo; pueden hacerme llegar sus inquietudes o sus puntos de vista tanto a mí como a mis colegas del Consejo. Escucharé atentamente sus propuestas y siempre lo haré desde una perspectiva política sobre la Escuela.
Por supuesto, el Directorio se hará cargo de las funciones que le competen y podrá estar tranquilo de que el Consejo no será precisamente su custodio.
Entonces, para concluir, brindo con ustedes por un año fecundo de trabajo para nuestra Escuela. Muchas gracias.
Dudy Bleger, 28 de marzo de 2008