Escribir
hoy, es inscribir una ausencia y la pena que nos acompaña. Escribir
hoy, es inscribir una pérdida en nuestra existencia, la perdida de
nuestra colega y amiga Concha Carretero. Ayer falleció y hoy, 31 de
enero, hemos ido a darle un último saludo y acompañar a sus familiares
en estos tristes momentos.
hoy, es inscribir una ausencia y la pena que nos acompaña. Escribir
hoy, es inscribir una pérdida en nuestra existencia, la perdida de
nuestra colega y amiga Concha Carretero. Ayer falleció y hoy, 31 de
enero, hemos ido a darle un último saludo y acompañar a sus familiares
en estos tristes momentos.
Cuando el afecto embarga, las palabras no son suficientes y el silencio es un buen compañero, entonces, de la escritura.
Desde el inicio del Seminario del campo
Freudiano en Valencia y en los distintos avatares de la conformación de
nuestra Escuela, Concha estuvo siempre participando con su trabajo y
dedicación al desarrollo del psicoanálisis de forma decidida y generosa.
Muchos de nosotros compartimos aquellos momentos de creación y
desarrollo de dicha andadura, no exenta de dificultades.
Freudiano en Valencia y en los distintos avatares de la conformación de
nuestra Escuela, Concha estuvo siempre participando con su trabajo y
dedicación al desarrollo del psicoanálisis de forma decidida y generosa.
Muchos de nosotros compartimos aquellos momentos de creación y
desarrollo de dicha andadura, no exenta de dificultades.
Como amiga, nos ha dejado miles de
anécdotas llenas de humor y vitalidad. Maravillosas piezas sueltas que
nos acompañarán y que seguiremos compartiendo con aquellos que tuvimos
la suerte de vivirlas con ella.
anécdotas llenas de humor y vitalidad. Maravillosas piezas sueltas que
nos acompañarán y que seguiremos compartiendo con aquellos que tuvimos
la suerte de vivirlas con ella.
Así seguiremos tejiendo los bordes del vacío que nos ha dejado.
Margarita Bolinches
En nombre de la Junta Directiva