(español)
Los encuentros Pipol se suceden y no se acumulan. Su preparación tampoco. Ésta vez tenemos dos años y no ocho meses para acomodar la propuestas del tema del encuentro europeo del campo freudiano, que son también las jornadas de la federación europea de las escuelas de psicoanálisis (FEEP).
Luego, el instante de ver, el 1 de julio 2007, dejó su lugar a otra cosa. Éste requerido por la interpretación que hizo Jacques Alain Miller, a partir de las ultimas jornadas de la Escuela, de la pendiente enjabonada donde corremos el riesgo de arruinar una vez más la agudeza del descubrimiento Freudiano.
Dos tiempos para comprender se han entonces entrecruzado, el que concierne la política Lacaniana, dónde todas las escuelas de La AMP han encontrado su compás. Amenazados de perder su norte, en Europa, sobre todo, como el enloquecimiento de su aguja lo manifestó (suspensión del pase en ECF, por ejemplo), han operado un restablecimiento (testimonios: nuestras próximas jornadas, la conversación de l’ELP sobre la formación del analista, hoy mismo en Madrid), no sin gran energía. Algunas veces excesiva, cuando del rincón de la interpretación de Octubre 2008, algunos han creído deducir un « conflicto » entre psicoanálisis puro y aplicado. Para Pipol IV, éste tiempo tuvo por objetivo ver la evidencia: la des-inserción en psicoanálisis no surge de la ideología social y sociológica de la inserción; dejar caer las formas de la división subjetiva marca cuan válida es para un sujeto su des-inserción del Otro cuando se reduce a ser el juguete o el desprendimiento de las identificaciones dónde el Otro se fija, para conocerse con el inconsciente, en vistas de encontrar la vía por donde vivir su real en un medio social restaurado. Los unos y los otros se escriben sin dudas en una cinta de Moebius. La emanacion clínica de la depresión subjetiva es vasta, dos referencias de otros escritos me parecen lastimarlo. La primera designa una fuente del “sou-venir” (recuerdo) : “ la inserción del viviente en la realidad que es lo que imagina”(p334) y la segunda indica dónde se inscribe “la distancia del sujeto supuesto saber en su inserción en lo real”, la lógica del fantasma suponiendo “que no hay otra entrada para el sujeto en lo real más que el fantasma”. Dejo aquí a cada uno el cuidado de articular estas piezas de 1967, como toda la enseñanza anterior de Lacan, en los términos del último.
Judith Miller, 25 avril 2009 PIPOL IV
4º Encuentro europeo del campo Freudiano :
Clínica y pragmática de la des-inserción