En realidad, este documental muestra el deseo decidido de una mujer, la realizadora, que aparece en pantalla, donde vemos que insiste, con traficantes extremadamente peligrosos, o que persigue al ministro para obtener respuestas a sus preguntas, o incluso cerca de los policías de aduanas con el fin de desenmascarar su impotencia para parar el tráfico. Es un cuerpo en movimiento, resuelto, lo que vemos en acción.
Los internautas no se han equivocado, el objeto de sus comentarios es la periodista, incluso para criticarla. Pequeña selección, no exhaustiva, de tweets:
– ¡Menos mal que los periodistas hacen su trabajo! Bravo por Vanina Kanban
-¡Es de traca! Cuando el ego se impone al periodismo, la calidad general pierde con ello. Lástima.
-¡De los yihadistas a los fabricantes la única mujer de la cadena es la periodista!
Disfrutamos viéndola manos a la obra
A veces el voyeur resulta sorprendido viendo cómo esos hombres políticos que se dirigen a la cámara nos desvelan que no ignoran que nosotros les miramos. E incluso en el calor del momento, algunas miradas furtivas a la cámara nos indican que saben que estamos ahí, detrás del agujero de la cerradura. A veces, cuando una puerta se cierra bloqueando nuestra mirada, hay como un alivio.
Ahí se convoca la mirada del espectador. Se trata de producir en su cuerpo el goce que el título le prometía. Hay, sin embargo, un cierto malestar en estar entre bastidores.
Los comentarios son elocuentes:
-Cuando veo esas imágenes la rabia aumenta.
-El reportaje de @Francetele Atentados #AucoeurduPouvoir es de una autenticidad increíble, sin ningún filtro. Enfoque emocionante.
-Rediff documental AttentasaucoeurduPouvoir en @France3tv y una ola de emoción que anima.
– AuCoeurduPouvoir deja una sensación rara. Ver tan rápido y de manera asumida el juego político en marcha deja perplejo.
El tercer documental: “Engranajes: Francia frente al terrorismo” dirigido por Clarisse Feletin, se retransmitió en France 5, el 6 de enero de 2.016. Ahí, como en el documental anterior, la realizadora desaparece detrás de la cámara, pero no es el ojo del voyeur, es el par S1-S2 el que está al mando, el significante amo y el saber.
Cuatro jóvenes que han ido o han querido ir a Siria, explican porqué. No utilizan el “je” sino “ellos” o “se” o “nosotros”. La única que dice “je” es una mujer que narra su calvario.
Hay también tres “expertos”, Dounia Bouzar, que dirige un centro de des-radicalización, Farad Khosrokhavar, sociólogo, y Abdelali Mamoun, imán y teólogo. Todos nos explican y saben. Se coloca al espectador en posición de receptáculo, el saber está en la pantalla. La pretensión manifiesta de la realizadora es la de “vencer el miedo, hacer comprender el fenómeno de radicalización”(3). Cuando se pone al amo en posición de agente, se produce un plus-de-goce con un afecto de satisfacción, y cuando es el saber que está en posición de agente reenviamos a su división a aquel a quien nos dirigimos. Las reacciones testimonian de ello:
-Desde que escuché a ese joven decir “sí, él ha matado a chavales, bah, es un hermano a pesar de todo…” ¡he dejado de ver France5!
-Esa información debería emitirse de forma obligada en todas las cadenas en prime time. Es de utilidad pública.
-¿Por qué los gobiernos no buscan a los “sponsors” de estos terroristas? ¿Quién saca la cartera para ayudarles?
-¡Bravo por France5tv y por Clarisse Feletin por el documental #faceauterrorisme difundido esta noche!
-France5tv, yo me planteo la pregunta…
-Hola, Clarisse es amable pero sobre eso creo que ya no tenemos preguntas, hemos comprendido todo.
El ojo es un receptáculo, está en el lugar del florero y el documental lo llena de un saber que acaba con cualquier cuestionamiento. Como se dice en el último comentario: “hemos comprendido todo”.
Last but not least, las redes sociales hacen circular imágenes de Barack Obama mientras llora al presentar su plan de restricción de acceso a las armas en Estados Unidos(4) http://www.lemonde.fr/ameriques/video/2016/01/06/les-larmes-d-obama-lors-de-la-presentation-de-son-plan-contre-les-armes-a-feu_4842368_3222.html
La cámara está fija, no hay ningún efecto de puesta en escena. Obama evoca la ola de asesinatos en masa y de repente se para. Se enjuga una lágrima, silencio, un largo silencio tratándose de televisión. Después pronuncia esta frase: Everytime I think about those kids, it gets me mad. “Cada vez que pienso en estos niños (asesinados) eso me vuelve loco”, los subtítulos franceses traducen “me pone furioso”, es correcto, pero al evitar la traducción literal, mad/loco, me parece que pasa de puntillas por la cuestión: un hombre que además es Presidente de los Estados Unidos, llora y confiesa que eso le vuelve loco, o sea que ya no es dueño de sí mismo.
Un ligero zoom, no hay efecto. Parece un momento de pura contingencia. Un Presidente de los USA llora en directo y dice que las masacres le vuelven loco, ¡punto! Pero los comentarios se contradicen, no están en oposición respecto al fondo del discurso, pero pretenden saber si Obama representa una comedia o no. Y la gran mayoría de ellos, que he leído en youtube, en Le Monde, l´Observateur y 20minutes, piensan que hace comedia. Al mismo tiempo este video se “repostea” millones de veces, y acumula millones de “like”.
En los tres primeros casos, las reacciones nos muestran que el fondo se interroga demasiado poco, la cuestión de la verdad no se plantea. Lo que supone un problema es la forma, en la medida en que produce un efecto en el cuerpo.
En el último caso, cuando no estamos en el marco de un documental, sino de una imagen que se basa en una casualidad, y a la que nos deberían hacer adherirnos más fácilmente, se produce lo contrario. Los comentaristas no creen en ello. “Actor´s Studio” dicen unos, “político trabajando” dicen otros.
Ahí donde hay una forma, una puesta en escena, no se cuestiona el fondo, se discute la forma y su impacto. Por contra, me parece que hoy ya no se cree en las imágenes. Se puede traficar con todo. La cuestión ya no es saber si la información es verdadera o no, si está comprobada o no. La información está íntimamente mezclada con la comunicación y todo el mundo lo sabe. Entonces, se diga lo que se diga, cualquiera que sea la forma que se le de no se cree en ello.
Tuve ocasión de decirlo(5), la comunicación no funciona, pero no se puede ignorar. Es la inmensa victoria de la teoría del complot, incluso los que no creen en la teoría del complot desconfían de las informaciones convertidas en mensajes. De pronto, nos autorizamos con más facilidad a creer cuando el hilo es visible. Las imágenes del 11 de septiembre han sido puestas en duda por los conspiradores, pero la emoción está presente ante el 9.11 de Michael Moore. Es decir, que la imagen cuando se anuncia como construida, como artificial, ya sea como ficción o en documental, provoca la emoción y sostiene la creencia. Cuando la imagen –el 11 de septiembre, Obama que llora y muchas otras- parece captar lo real, lo que surge hoy es la duda, la incredulidad.
El
choque, es darse cuenta de que hoy, el descubrimiento es un saber
generalizado en el espectador, un “ça voir” (NT). Ya no se cree en la
imagen anónima que pretende ser una transcripción directa de lo real.
Por el contrario, en el documental de Vanina Kanban, repercute en su
cuerpo, ella lo pone en escena, tanto como en juego, lo expone, y esta
imagen que sabemos construida vuelve su objeto creíble. Porque su objeto
está sostenido por un cuerpo, el cuerpo de aquélla que escenifica su
estilo, el de ella.