Prólogo
Paula Rodríguez Acquarone
“la incurable otredad
que padece lo uno”
Antonio Machado[1]
I
Borges observa que no hay una teoría del prólogo.
En los tablados isabelinos, el prólogo era el actor que proclamaba el tema del drama. Asimismo nos refiere a formas subalternas del brindis y a la oratoria de sobremesa, pero también a una especie lateral de la crítica. Nos propone una serie de prólogos a libros que no existen, prólogos que abundarían en citas ejemplares de esas obras posibles. “prologaríamos, acaso, un Quijote o Quijano que nunca sabe si es un pobre sujeto que sueña ser un paladín cercado de hechiceros o un paladín cercado de hechiceros que sueña ser un pobre sujeto”. Finalmente escribe que en este prólogo que imagina convendría evitar la parodia y la sátira, las tramas deberían ser aquellas que nuestra mente acepta y anhela.
Este nuevo volumen de la Colección de la Orientación Lacaniana comienza con el libro que imaginamos, donde los analistas de la orientación lacaniana escriben sobre las creencias. Tema enorme en el psicoanálisis. Cada autor escribe desde su mirada clínica, que es también su mirada hacia la civilización. Miradas que se intersectan y que fueron protagonistas en ambos libros de la Colección de la Orientación Lacaniana que me tocó dirigir.
Encontrarán aquí modos de ubicar las creencias en el psicoanálisis, que es una experiencia de palabra. La palabra, nos recuerda Lacan, es su instrumento, su marco, su material, y hasta el ruido de fondo de sus incertidumbres.[2]
El tema de las creencias nos concierne en la época post paterna. Los semblantes varían, los ideales han mutado en su valor.
Como dice Jacques Alain Miller, sabemos que el mundo en el que vivimos y viviremos estará animado por el frenesí de la elección que se extiende hoy hasta la elección del sexo. Podemos captar la dinámica heréticadel mundo contemporáneo. Y se pregunta si debemos adherir a ello. “En todo caso no sin preguntarnos si el reino de la elección no será peor que el reino del padre, peor que el sentido común de la ortodoxia”[3]
El tema de las creencias atraviesa la enseñanza de Lacan -creer en el fantasma, creer en el síntoma, creer en el padre o en el inconsciente; en una mujer… Asimismo, creemos en el tropiezo, en el lapsus, en el equívoco, en lo que no anda, desde Freud en adelante.
Las creencias tienen sin embargo, una relación con lo real en tanto su fundamento. El “enigmático fenómeno de la creencia”[4]liga un goce singular en juego. Pero podemos distinguir las creencias en la neurosis de aquellas que pueden orientar nuestra práctica como analistas. Qué pasa cuando las hay y más aún acaso cuando no las hay.
En continuidad con COL 2018, Feminismos[5],nos parece oportuno proponer interrogar el estatuto de las creencias en la actualidad. Como se articulan a la pregunta por la caída del padre y aún más a la caída del falocentrismo.[6]
¿Qué particularidad encontramos en lo actual? ¿porqué nos interesa en tanto psicoanalistas? ¿por qué proponemos siguiendo la orientación lacaniana, una práctica animada por un ateísmo viable? Los escritos que encontrarán aquí proponen diversos modos de pensar las creencias.
“Lo más singular de cada uno, la laguna en la serie, eso siempre es del orden de lo insensato en lo que hay que creer”, escribe Silvia Baudini.
Irene Kuperwajs hace un recorrido para ubicar lo que resta de la creencia al final de la experiencia analítica; y ubica el inconsciente real que hace pareja con la certidumbre del final.
Lo que el psicoanálisis propone es conla creencia, hacer otra cosa: hacer lugar al goce, un afuera, desde donde se sostiene toda creencia, escribe Florencia Dassen.
Patricia Moraga ubica un efecto del nombre del padre, la creencia. Entonces, se pregunta, si esto es así, ¿cómo puede el análisis producir un ateo viable?
Gabriel Racki toma la gradación clínica de las creencias, y las pone en tensión con la irrupción de lo singular.
Las “sorprendentes definiciones” de Lacan sobre la creencia en el síntoma son abordadas en su texto por Luis Tudanca. Creencia en el síntoma, creencia en unamujer, y en lamujer.
Paula Vallejo por otro lado, se pregunta en qué creen los que no creen, si las creencias son soluciones posibles frente al trauma de la inexistencia de la relación sexual.
Claudia Lázaro elije abordar la diferencia entre la experiencia mística y la religiosidad, como modos distintos de arreglarse con la cosa.
El trabajo de Juan Carlos Indart nos habla del núcleo de la política del psicoanálisis frente al malestar en la civilización. No hay que creer que por no ser católicos o por no seguir los preceptos de ninguna religión reconocida como tal, no se tienen esos síntomas y sus hábitos, advierte.
Finalmente, encontrarán una entrevista a Dalila Arpin, a propósito de su tesis de doctorado, donde conversa con las elaboradísimas preguntas de Perla Drechsler.
II
Fue el primero en no tener nombre, porque la gente, toda la gente, se refería a él como el Padre, intuyendo que no era únicamente un hombre, sino un origen, un inicio, un tiempo antiguo, la hora sin precedentes y la primera tierra. Antes de él tal vez no hubo nada, y por eso era para todo el mundo, y de todas las cosas, El Padre.[7]
El analista partenaire de la civilización, tiene algo para aportar en su esfuerzo de lectura de los acontecimientos de la época con las herramientas del psicoanálisis, como prologábamos en el volumen anterior.
Retomamos la propuesta de articular los temas de la Colección Orientación Lacaniana con los fundamentalismos de hoy, para abordar el nuevo proyecto. Como dice Silvia Ons, “La incredulidad postmoderna puede darse la mano con los fundamentalismos más actuales”. [8]
Es asimismo una mirada sobre el goce contemporáneo y la necesidad de una creencia en el Otro cuando el amo es el goce mismo[9]. Cuando el discurso del amo contemporáneo articula un goce sin parar, lo que Lacan en Radiofonía llama el frenesí del discurso del amo.
El goce sin limite que lo habita no permite considerar una armonía final, nos dice Eric Laurent. Esto nos habla de un triunfo de las religiones no como sabiduría sino como pasión, en su articulación a la locura, a la pulsión agresiva, a la pulsión de muerte.[10]
Seguimos el esfuerzo de Lacan por pensar lo que sería un psicoanálisis que no se orientara por el Nombre-del-Padre, sino más bien por el fantasma y por el goce en su particularidad, más allá del Edipo freudiano. [11]
¿Qué sería de una práctica que no se orientara por la garantía del Otro del Otro?
Encontrarán precisiones al respecto en el texto de Jacques-Alain Miller que publicamos, y que es contemporáneo a la publicación del Seminario VI. Nos parece fundamental la distinción de un padre que es asimismo portador de la ley sin serlo, y que es por esto afectado él también por la castración; para poder ubicar un goce en singular, que no se deja universalizar. El nombre del padre no lo abarca todo, no metaforiza todo el goce. Que de las creencias no se dialectiza? Este seminario, como dice Jacques-Alain Miller, teniendo una idea del recorrido de Lacan en su conjunto vemos cómo se trazan ahí las pistas que nos condujeron a nuestra práctica hoy y también a nuestra política.
Los invitamos entonces, a adentrarse en su lectura.
Mi agradecimiento a Laura Petrosino, Paula Gil, y Andrea Berger por su cuidadosa predisposición a la lectura y al trabajo en conjunto. Fue un gusto compartir con ellas el desafío de idear este libro.
Un especial agradecimiento a Ruth Gorenberg que fue a la vez compañera y directora adjunta, ocupando un lugar indispensable para esta gestión. A Perla Drechsler por su colaboración especial para este libro, un aporte precioso a la hora de preparar las preguntas para Dalila Arpin.
A Leonardo Gorostiza por su asesoramiento atento y amable.
También a Diana Wolodarsky, directora de la EOL, y a mis compañeras de publicaciones, con quienes mantuvimos un diálogo fluído y un interés genuino. Y desde ya a los autores que hicieron posible el libro que imaginamos.
[1]Antonio Machado, en JUARROZ, Tercera Poesia Vertical. Emece Editores, Bs As, 1993, p.134. Ver a continuación, el comentario de Paula Gil.
[2]Lacan, Jacques Instancia de la letra, p.474, en Escritos I, Siglo XXI editores, Bs As, 1988.
[3]Miller, J. A., Segunda parte de la conferencia en Turín: los heréticos, 08-07-2017. En www.eol.org.ar.
[4]Gorostiza, L. Jornadas rosario, 2018, inédito.
[5]Feminismos. Variaciones, controversias. AAVV, En Colección Orientación Lacaniana, Grama Ed, Bs As, 2018.
[6]Tema Jornadas EBP 2018
[7]Baricco, Alessandro, La Esposa Joven.Ed Anagrama, Barcelona, 2016, pág. 122.
[8]Ons, Silvia, Segunda noche preparatoria Jornadas EOL 2018, en la página de las jornadas, www.jornadaseol.com
[9]Laurent, Eric, en el articulo publicado en el presente volumen
[10]Eric ídem n 8
[11]Laurent, Eric, ¿Qué es un psicoanálisis orientado hacia lo real? XXVI Jornadas Anuales de la Eol, página de las jornadas, www.jornadaseol.com